El pasado miércoles ocurrió algo en el colegio, que no tuvo mucha repercusión en principio, pero que estoy seguro, que va a cambiar mucho a la Asunción en poco tiempo.
Cuando se proyecta un gran edificio o una gran construcción, se organiza un gran evento para anunciar que se va a colocar la primera piedra. Esa primera piedra, poco o nada tiene de influencia en la construcción del edificio, es más, tiene su minuto de gloria pero rápidamente queda oculta bajo tierra, para permanecer el resto de la eternidad en el mas absoluto olvido, sin embargo, es el primer paso de algo grande.
Cuando pasa el tiempo, se observará la magnitud de lo construido, y lo que llamará la atención a todos serán los adornos y lo majestuoso de la nueva construcción, sin embargo, lo que realmente mantendrá en pie el edificio, será la fuerte estructura, que piedra sobre piedra, mantiene erguido y seguro la figura allí creada.
El pasado miércoles se puso la primera piedra, y aunque no estábamos todos, eso no importó, ya que aunque fue el primer día, no será el último.
Se suspendieron los entrenamientos, y se celebró el primer seminario de entrenadores de la Asunción.
Esta claro que tenemos un gran potencial humano, que tanto en jugadores como entrenadores, estamos mas que preparados a todo, y la ilusión por vestir la camiseta y pelearla hasta el final, estan fuera de toda duda, sin embargo, nos faltaba una herramienta muy necesaria, el trabajo en equipo e integrado de todos.
En Asunción, es lo mismo futbol sala que baloncesto, o infantil masculino que benjamin femenino, todos somos Asunción, y como tal tenemos que manifestarlo. Desde siempre, nos ha gustado, que los entrenadores se conozcan, trabajen juntos, y se apoyen, ya sea desde las gradas, o desde el banquillo, sin embargo, teníamos una pregunta sin responder…..¿Y si lo que sabemos todos, lo uniéramos, lo pusiéramos en común, y de allí, de esa sabiduría común, bebieran todos nuestros niños?…..sin duda, es el paso necesario.
Todos tenemos algo que aportar, los primeros, nuestras nuevas incorporaciones Felipe y Victor, pero llegará el momento de todos, llegará la hora de que cada uno demos nuestra visión y pongamos al alcance de todos lo que sabemos.
Parece fácil, sin embargo, es necesaria una gran capacidad de reciclaje y de actitud positiva, que el primer día se pudo comprobar que será así, sin embargo, quedan muchos seminarios, y muchos días de trabajo en común, para construir un gran edificio cómo el que nuestra Asunción se merece, sólo esta puesta la primera piedra.
Jose Cabra.