Que nadie se asuste, el articulo desde las gradas seguirá fiel a su cita cada semana.
Ha llegado el momento de la despedida, pero como se dice habitualmente, es un hasta luego, estoy seguro.
Hace tres años llegué hasta la zona mas infantil que teníamos en ese momento en el colegio, 3º infantil de Futsal. Movido por la curiosidad y el reto de saber hasta que punto es posible trabajar con estos pequeños de 5 años, me hice cargo de la escuela mas pequeña que teníamos cuando únicamente había llevado anteriormente de cadetes en adelante.
Pensando que me encontraría una jauría de niños incontrolables, recibí en suerte a un grupo de niños que estaban dispuestos a convertirse en grandes deportistas y trabajadores ejemplares. Aquel primer día, era el primer día que muchos de ellos se disponían a calzarse una botas por vez primera y ese día ningún padre y ninguna madre, incluso abuelos, estaban dispuestos a perdérselo.
Con unas gradas tan llenas, la responsabilidad era máxima y siempre recordaré cómo en cuanto metieron el primer gol, estos gritaron el gol como si hubiésemos sido campeones en aquel momento. Después llegaron los primeros partidos (y palizas) contra las Esclavas, o ese campeonato de futbol 7 que tanto nos enseñó o las ligas de estos dos últimos años que han sido para mi, algo inolvidable.
Creo que es el momento de separarnos, y estoy seguro que será de manera temporal, ya que tras 3 años juntos, lo mejor para un entrenador y un equipo es encontrar nuevos retos e ilusiones, y dejar paso a otra persona tan capacitada como uno para darles un nuevo giro de tuerca.
No podré entrenar a otros equipos sin compararlo con este, siempre tendré un ejemplo que poner en estos niños y sobre todo, y sin querer olvidarme en ningún momento, los padres y madres y abuelos que me han apoyado y acompañado cada día estos últimos 3 años.
Gracias a todos por la dedicación y el apoyo.
Jose Cabra.