Aun me considero joven, pero a pesar de mi juventud llevo ya muchos años entrenando, concretamente diez. En todo este tiempo el destino ha querido vincularme mayoritariamente al baloncesto femenino, más que nada por que allá a donde he ido el femenino siempre tuvo más peso que el masculino. Por otro lado, si no me equivoco, la categoría en la que más experiencia tengo es la cadete.
Por todo ello cuando a principio de esta temporada que ahora toca a su fin me dieron la oportunidad de ser el entrenador del cadete B de AD Asunción pensaba que conocía la categoría, la experiencia me decía que no era fácil llevar equipos cadetes y menos femeninos, en estas edades las jugadoras dan el paso definitivo de niñas a mujeres y según tenía entendido era ley de vida que se empezasen a interesar por otros tipo de cosas dejando al baloncesto siempre presente pero quizás algo más apartado. Esto me había ocurrido temporada tras temporada, año tras año, a veces con mejores resultados deportivos otras con peores, pero la tónica general siempre habia sido la pérdida de interés por parte de algunas jugadoras, por lo que con el tiempo la iusión por el baloncesto se había ido apagando en mi corazón y si aplicamos el sentido común esta debería haber sido otra temporada más… ¿qué podía ser diferente este año que lo cambiase todo?
Por suerte, la vida también me enseñó que el sentido común en ocasiones es el menos común de los sentidos y desde el primer día vi que el grupo que me había encomendado entrenar José Cabra allá por el mes de julio de 2014 era diferente. Al principio aun tenía dudas, quizás la novedad de tener un nuevo entrenador podría motivarlas un tiempo, pero los entrenamientos se sucedían y la cosa no solo no iba a menos sino que cada entrenamiento era mejor que el anterior, cada día preparaba los entrenamientos con más estusiasmo por que sabía que “mis jugadoras” se iban a dejar la piel en el entreno y se merecían lo mejor. No importaba tener un día duro en el trabajo llegar tarde a casa y solo querer echarte a dormir, ellas se merecían tener preparado el entrenamiento que a mi juicio fuese el mejor posible y esa relación en la que yo daba sabiendo que iba a recibir empezó a dar sus frutos.
Los pirmeros meses no fueron fáciles, perdiamos partidos, eramos un equipo de primer año y se hacía duro, pero se empezaban a ver detalles. Recuerdo que perdimos el primer partido contra El Candado de 70 puntos, un palo muy duro, pero en la vuelta tan solo un mes después nos volvieron a ganar, pero está vez solo de 30 puntos, habrá quien se quede con: “Vaya paliza le ha metido el Candado al cadete B de Asunción, les han ganado de 30″, yo me quedé con: “Nos han ganado, si, pero por 40 puntos menos que en la ida”.
Perdiamos algunos partidos, otros los ganábamos pero las sensaciones eran cada vez más positivas. En el partido de ida contra Estepona perdimos de 40, no nos salió practicamente nada, en el partido de vuelta perdimos de 5, nos faltó 1 minuto más para culminar la remontada y fue la primera aparición estelar de Lucía Gaviño. Aun estaban por llegar varios MVPs para ella y que esta jugadora estuviese en boca de todos por su extraordinaria calidad, en ese momento era solo una jugadora por explotar, sin duda ese día hizo BOOM.
Llegó la Navidad, yo me sorprendía que en estas fechas tan señaladas la ilusión por entrenar del equipo iba en aumento, incluso pidiéndome más entrenamientos de los planificados. En los tres priemros meses de la temporada la ausencias habían sido mínimas, el compromiso del equipo era total y ya me empezaba a creer que este no era uno más de tantos equipos cadetes femeninos que había entrenado en el pasado, este equipo tenía algo diferente, ¿que sería?
Pasó el tiempo y seguimos ganando batallas. Vencimos a Benalmádena de 15 puntos cuando en los dos partidos de grupos antes de Navidad siempre nos ganó, ganamos a San Estanislao tanto en la ida como en la vuelta por más de diez puntos cuando nunca en la historia nuestro equipo le había ganado, vencimos al cadete A de Asunción, las mayores, todo un equipazo, por 10 puntos, entramos en una dinámica imparable, el equipo estaba dando señales de lo que era capaz, quizás pocos las entendían, a mi me gusta pensar que yo si.
Fue entonces cuando llegó la Copa Colegial. Cuatro de nuestras jugadoras fueron selecionadas para el equipo de la Copa Colegial y realizaron un papel brillante en el torneo, fueron Alejandra San Emeterio, Carmen Vivas, Victoria Gómez y Lucía Gaviño. Sin duda el cadete B tuvo mucho que ver en la victoria en este campeonato y sobre todo Lucía Gaviño que fue coronada como MVP del campeonato, si han oido bien, la jugadora que hace solo unos meses se mostraba insegura y temerosa, la jugadora que se venía abajo ante la exigencia, ahora, era mejor, y no solo por el trabajo en los entrenadores y por el apoyo de sus compañeras, que también, sino por que ella quiso, quiso ser la mejor por que se encontaba a gusto, motivada y feliz.
La temporada continuaba y se acercaba la recta final. La palabra GANAR hasta entonces tabú para este equipo se repetía en nuestras cabezas, no por ambición, o por buscar que nos regalasen el oído, sino por que nos veiamos fuertes, habiamos entrenado duro y nos lo mereciamos. Teníamos dos match balls, Asunción A en las semis escolar y la final federada contra Alhaurín.
Llegábamos a las semis FERE tras ser segundos de grupo detrás de Gamarra y venciendo a Teresianas en unos duros cuartos de final. Nos esperaban nuestras compañeras del cadete A de Asunción, un equipo herido tras perder en los dos enfrentamientos federados contra nosotros y que había renacido de sus cenizas. En el partido de ida fueron superiores a nosotros, demostrando que son un equipazo y pusieron la eliminatoria con +16 a su favor. El partido de vuelta iba a aser duro, teniamos que remontar 16 puntos, en ciertos momentos del partido parecía posible pero finalmente no lo fue, el cadete A pasó a la final y fue justo campeón de la competición venciendo a Gamarra en la final. Nosotros nos quedamos a las puertas…
En federado después de una primera fase larguísima en la que jugamos 16 partidos, solo los dos primeros clasificados de esa fase jugarían una final. Y si, el equipo cadete B de AD Asunción, las de primer año, quedaron segundas y se enfrentarían a un Alhaurín invicto hasta el momento en una final a tres partidos.
La eliminatoria fue muy igualada, tanto que logramos forzar el tercer partido ganando en casa y haciendo que nuestro rival cosechase su primera derrota de la temporada. En el tercer encuentro se nos escapó, no fue un buen partido, los nervios y el cansancio hicieron mella y nos tuvimos que conformar con el subcampeonato.
Habiamos quedado entre los cuatro mejores en escolar, subcampeones en federado, ahora nos tocaba en Campeonato de España Escolar, la progresión indicaba que seriamos campeones, ¿sería posible?
Llegabamos a los Juegos EMDE cargados de ilusión y con la única obligación de pasarlo bien. Desde el primer día se respiraba un ambiente fantástico, nuestro objetivo era disfrutar de la experiencia, divertirnos, sin olvidar que habiamos venido a competir y tras la primera noche llegaba un duro día de competición con dos partidos.
En primer lugar nos enfrentábamos a Obispo Perelló de Madrid. El partido fue duro, no empezamos bien y fuimos a remolque durante practicamente todo el encuentro. Pero nuestras chicas querían ganar y se esforzaron al máximo lo que nos brindó la posibilidad de ponernos por delante logrando finalmente la victoria por un ajustado 36-39. Ese mismo día por la tarde nos enfrentábamos a Colón de Huelva en el que fue el partido más plácido del torneo. Conseguimos la victoria por un tanteo de 49-26. Pasábamos a cuartos invictos.
El campeonato seguía avanzando y tras un día de descanso en el que fuimos a cenar toda la expedición asuncionista a Burguer King nos esperaba el conjunto madrileño de Virgen de Atocha en cuartos. Empezamos mal, poniéndonos incluso 8 abajo en el marcador. Pero nuestro equipo no dejó de competir, siguió luchando, siguió peleando y logró remontar el partido para sacar la victoria por 27-23 y clasificarnos para semifinales.
Tras los partidos de cuartos en los que los dos cadetes de baloncesto femenino habían logrado la victoria y por tanto se aseguraba una semifinal asuncionista con sabor a final anticipada nos fuimos a Aqualand. Nos lo pásamos en grande en lo que fue una tarde maravillosa disfrutando de las atracciones, de las piscinas pero sobre todo de la convivencia con el resto de compañeros tanto de nuestro equipo como del resto. No había rivalidad entre el A y el B sino buenos gestos, armonía y ganas de pasarlo bien.
La convivencía del equipo seguía siendo estupenda, ya eran clásicas las conversaciones en los pasillos de la planta décima del hotel, las niñas se disfrazaban, jugaban a las cartas o simplemente conversaban, el ambiente era óptimo pero aun estaba por llegar lo mejor.
La noche antes de las semifinales vivimos un momento precioso, posiblemente unos de los momentos más especiales que he vivido como entrenador. Lo que empezó siendo una charla táctica pronto dejó de serlo para hablar de nuestras cosas, para preocuparnos los unos por los otros, para recordar momentos juntos, para dejar de ser compañeras de clase, compañeras de equipo y convertirnos en familia. A todos se nos escapó alguna que otra lágrima esa noche, sin duda fue una noche mágica. En aquel momento nadie lo sabía, ni yo mismo, pero la semilla para ser campeones ya había sido plantada, la actitud que adoptó el equipo tras esa charla no podía derivar en otra cosa que no fuese la victoria, ya no luchábamos únicamente por ser los mejores, ni por lograr un hito histórico, luchábamos por que queriamos a quien teniamos a nuestro lado y queriamos hacerla feliz, luchábamos por algo mucho más grande, por nuestro amor propio, por conseguir algo con mi equipo, con mi familia, nuestra fuerza interior era incontenible, solo así podriamos competirle a todo un equipazo, un equipazo como el cadete A de AD Asunción.
El partido de semifinales fue precioso. Los dos equipos ofrecieron un baloncesto en el que las defensas eran en ciertos momentos superadas por los ataques para cambiar a la siguiente jugada y brindar una defensa incontestable. Cualquier equipo pudo ganar, pueba de ello es que al final del tercer cuarto el cadete B ganaba de 10 al cadete A y al inico del último periodo el A logró empatar llevando a cabo un baloncesto sensacional. Pero el B volvió a tirar de raza y sacó sus zarpas para asestar el último golpe al cadete A y gracias a un mayor acierto de cara al aro el cadete B logró llevarse el partido por un ajustado 34-38.
Como detalle recordar que muchas jugadoras asuncionistas derramaron sus lágrimas, es comprensible, unas por la emoción de estar en la final, otras por la decepción de la derrota, pero habían unas lágrimas muy especiales, unas lágrimas fruto del amor, las lágrimas de Paula Escaño del cadete B, finalista de un campeonato de España, que lloraba por ver tristes a sus compañeras del cadete A, en especial a su hermana Marina. Hay que estar hecho de otra pasta para dejar de lado la emoción de haber conseguido algo tan extraordinario como meterse en la finalísima para preocuparte por los derrotados por que para ti son lo más importante, bravo por Paula por ser tan buena persona y bravo a sus padres por la educación que le han dado.
Tras la semifinal fuimos a celebrarlo yéndonos todos juntos a comer
¡Estábamos en la final! Parecía increible, pero aquel equipo de primer año que a principios de temporada planteaba tantas dudas, que a principio de temporada parecía haber perdido la ilusión, ese equipo se había metido en la final de todo un campeonato de España, ese equipo se había clasificado para los Juegos Internacionales FISEC que se celebrarán en Paris, ese equipo ya había como mínimo igualado el mejor resultado histórico de un equipo de baloncesto femenino del colegio en unos campeonatos nacionales escolares, pero ese equipo quería más, quería ser campeón.
En la final nos enfrentábamos a Calasancio de Madrid, equipo que ya superó el cadete A en grupos aunque no sin esfuerzo. Fue un partido en el que ambos equipos se jugaban mucho y salieron a la pista con mucho respeto, prueba de ello es el tanteo de 0-1 al final del primer periodo. Predominaron las defensas a los ataques en el choque y sin duda la mafnífica defensa que impuso nuestro cadete B fue la que abrió el camino al oro.
Se logró la vicoria por un marcador de 23-26 y las chicas del cadete B ya habían hecho historia siendo el primer equipo de baloncesto femenino en la historia del colegio en ganar un Campeonato de España Escolar, grandes muy grandes estas jugadoras. Además Lucía Gaviño fue elegida como miembro del quinteto ideal de campeonato, sin duda un premio más que merecido para esta extraordinaria jugadora.
Tras el pitido final una explosión de emociones recorrió nuestro cuerpo, unas lloraban de alegría, otras reían derrochando felicidad, otras no se lo creian y había quien experimentaba un poco de todo. Éramos campeones de España, aun suena raro pronunciarlo, parece que es más prudente decirlo en voz baja por el miedo que sea un sueño del que no queremos despertar. Pero con el tiempo cada vez entran más ganas de gritarlo fuerte, muy fuerte, por que cuando en otras ocasiones veías a otros equipos conseguir tal éxito los mirabas con un poco de envidía sana deseando estar ahí pero consciente de la dificultad de llegar, y ahora si lo podiamos gritar, para que todo el mundo se entere, por el cadete B de AD Asunción, ese equipo de primer año, ese equipo formado por 17 guerreras que se dejan la piel en el campo, ese equipo que ya es leyenda, ese equipo… ¡¡¡ES CAMPEÓN DE ESPAÑA!!!
Antes me preguntanba que podía tener este equipo de diferente al resto de equipos cadetes de baloncesto femenino que había entrenado. La diferencia a día de hoy la tengo clarísima, son un grupo de amigas fuera del campo que dentro de la pista se preocupa una por la otra, cada una entiende su rol y lo ejecuta a la perfección, todas están comprometidas, se esfuerzan, están motivadas, tienen calidad, etc, cosas que se pueden conseguir solo si estas a gusto, si te sientes importante dentro del colectivo, si te importa luchar por ti y por las tuyas, si, sin duda este equipo es diferente, es un EQUIPO con mayúsculas.
Prueba de los extraordinarios valores de nuestros jugadores fue cuando en la regogida de trofeos en cadetes, Alejandra San Emeterio del cadete B invitó a subir a su compañera del cadete A María Carrillo a la primera posición del podio para dejar claro que La Asunción está en lo más alto.
Alejandra San Emeterio del cadete B y María Carrillo del cadete A en lo más alto del podio
Esta crónica se titula “Simplemente… gracias”, y es que no quiero dejar pasar la oportunidad de agradecer a todos aquellos que han colaborado de una u otra forma en la consecución de este éxito.
Gracias a la organización de los Juegos EMDE por su profesionalidad y por darnos la oportunidad de disfrutar de esta experiencia.
Gracias a los jugadores de otros equipos que acudieron a animar al nuestro, en especial al cadete A de fútbol sala y al cadete A de baloncesto femenino.
Gracias a los compañeros que en todo momento habéis seguido al equipo y nos habéis apoyado. Gracias Felipe, Albeto Hinojosa, Gonzalo, Jorge Alcalá, Ale Garijo, Cristina Hinojosa, Victor Aspizua, Edu San Martin, Luis Guerra, Cristina Hirschfeld, Inma, Encarni, Zape y disculpad si me dejo alguno.
Gracias a Jorge Rosell por haber empezado todo esto, eres un grande y gran parte de esté título es también tuyo. Como diría Gerard Piqué “Contigo empezó todo”.
Gracias a Jose Gatell, Agustín Conejo, Yolanda Terol y sobre todo a Jose Cabra por confiar en mi y darme la oportunidad de dirigir a este equipo. Es un lujo contar con una directiva tan implicada, cercana y a la que le importa tanto La Asunción.
Gracias a todos los padres, sois excepcionales. Con unos he tenido más trato que con otros pero la implicación de todos ha sido ejemplar, el apoyo al equipo ha sido constante e incondicional y solo daros la enhorabuena por la educación que le habéis dado a vuestras hijas, no lo podríais haber hecho mejor.
Gracias Javi por mostrarme lo que muchas veces no veía, por tu modestía y humildad a pesar de saber de esto tanto o más que yo, por el trato tan extraordinario a las niñas y gracias por tu compromiso y dedicación altruistas.
Y por último, gracias, gracias, gracias y mil gracias a mis jugadoras. Gracias por brindarme este año de ensueño, gracias por demostrarme que no se trata de la edad, ni de la categoría, ni nada por el estilo, sino que se trata de las personas, gracias por la ilusión de vivir todo esto juntos, gracias por motivarme a dar lo máximo, gracias por todo lo que he recibido de vosotras, gracias por el cariño que me habéis regalado, gracias Marta López por tu compromiso indiscutible e incondicional con el equipo; gracias Resi por animar hasta perder el aliento; gracias Carmen por gastar hasta la última gota de sudor en la pista por tu equipo; gracias Marta Martín por comprender y perdonar; gracias Natalia por ser una niña tan extraordinaria y, aunque a veces te cueste exteriorizarlo, ser una a las que más le importa el equipo; gracias Alejandra por volver a sonreir jugando al baloncesto y hacerme disfrutar tanto viéndote; gracias Nuria por tu alegría y los momentos tan buenos que nos dejas; gracias Vito por vencer tus miedos y convertirte en la jugadora que yo quería que fueras; gracias Paula por tener un corazón tan grande que haga quedar en segundo plano el hecho de que seas una jugona; gracias Celia por ayudarme, comprenderme y valorarme; gracias Rocío por abrirme los ojos y enseñarme que las segundas oportunidades pueden deparar sorpresas maravillosas; gracias Lucía simplemente por ser como eres, un ejemplo para tus compañeras y una motivación para tus entrenadores; gracias Marta Poyato por esa sonrisa eterna que nos transmite tanto, gracias Rosa por integrarte tan bien en el equipo y ayudarnos tanto; gracias Sole por tu buena actitud incluso cuando era lícito no tenerla, gracias Sofía por lo excelente compañera, persona y jugadora que eres, y gracias Mercedes por hacerme fáciles las decisiones difíciles.
Pero sobre todo, quiero daros las gracias a todas por haberme hecho recuperar la ilusión por el baloncesto, muchas gracias de todo corazón.
Esta temporada se acaba, pero sin duda, nunca la olvidaré.
A mi esto de escribir no se me da muy bien pero bueno lo intentaré.
Lo primero quería dar las gracias tanto a Álvaro como a Javi y por supuesto a vosotras niñas porque habéis hecho que este año sea inolvidable.
Yo creo que ninguna de nosotras se esperaba esto la verdad, lo deciamos pero como en un futuro lejano posible de conseguir pero muy difícil.
A principio de temporada empezamos un poco así como con desganas pero poco a poco como por arte de magia empezamos a ganar partidos, luchar y defender con más ganas… Nadie sabía el porqué de todo esto pero yo creo que si lo sé, día tras día ibamos cogiendo más confianza,ayudarnos más entre nosotras y a unirnos como una verdadera familia.
Tras la magnífica temporada llego el ansiado campeonato de España, nosotras íbamos a por todas pero nos faltaba algo para llegar a esa complicada meta.
Jugamos los partidos de grupos de los cuales ganamos los dos por lo tanto jugaríamos contra el segundo clasificado del grupo 1, teníamos bastante miedo de este partido ya que los años anteriores caiamos siempre en cuartos pero esta vez no era así ganamos el partido por lo tanto iriamos a las semis contra el cadete A.
El día anterior al partido de semis fue muy emotivo nunca mejor dicho, Álvaro y Javi nos dieron una charla como siempre pero esta era diferente a las demás, empezaron a decirnos las cosas que nos hacían especiales y no paraban de repetir lo orgullosísimo que estaban de nosotras.
Después de que los entrenadores se marchasen nos tocó a nosotras, esa noche hubo un mar de lágrimas impresionante porque lo que nos faltaba para conseguir esa gran meta había llegado, ya se había formado la gran familia, se acababa de formar con todas las palabras de agradecimiento y orgullo de cada una de nosotras, esto hizo que nos motivásemos más y lo que nos llevó a ganar el partido y llegar a la gran final, solo nos faltaba un último empujoncito para llevarnos el oro a casa y de verdad ese día no pudimos estar más concentradas y más motivadas, fue un partidazo de los nuestros, y derrepente sonó el pitido final, habíamos ganado! quien lo diría ,el equipo más pequeño del campeonato se había llevado el oro, por lo tanto nos ibamos a París el año que viene para jugar el campeonato del mundo, lo conseguimos si, pero lo que nos hizo ganar al otro equipo no fue solo la calidad de nuestras jugadoras si no también el apoyo de toda la grada asuncionista y el banquillo que se dejó la voz hasta el último segundo.
Todas las jugadoras del equipo son buenas individualmente pero juntas somos imparables, mi madre dice que eso se llama sinergia ya que el trabajo de todas juntas es superior al trabajo de una sola persona por buena que sea.
Y sí que era super difícil, pero lo grande se hace pequeño con vosotras niñas, ahora a conquistar París y hacer una gran temporada, no sabéis lo muchísmo que os voy a echar de menos el año que viene y sin vosotras nada será lo mismo.
Os quiero muchísimo, nuria.
Enhorabuena a todas y por supuesto a Álvaro y javi
Estoy muy orgulloso de vosotras y me alegra muchísimo el éxito que habéis obtenido, por vosotras, vuestros entrenadores, padres y por el colegio al que lleváis con tan buena imagen.
Muchas gracias en especial a Lucia por acordarse de su antiguo entrenador que seguramente no alcanzó esos éxitos pero que intentó formar a estas campeonas en basket y sobretodo en valores
Muchísimos besos a todas y ya informareis de las fechas de París!! Que yo me apunto!!!
Un beso a todas
Bueno lo primero muchísimas gracias por esta temporada tan maravillosa que hemos tenido. Gracias sobre todo a Álvaro y a Javi por todo lo que habéis conseguido, por devolverme la ilusión por el baloncesto, por todas esas motivaciones que nos habéis dado y por nunca rendiros. Habéis hecho que sea un campeonato inolvidable lleno de momentos increíbles. Habéis conseguido que estemos más unidas que nunca y que más que un equipo, seamos una familia. Espero que el año que viene sigáis siendo nuestros entrenadores. Muchísimas gracias y feliz verano.
Os lo merecéis. Os lo merecéis todos. Desde Álvaro, pasando por los padres y terminando como no, en vosotras.. Me habéis regalado un año maravilloso, desde el día uno que os conocí por primera vez, hasta el último día en el campeonato. Me he reído, aprendido y sobretodo disfrutado muchísimo de vosotras. Me dijeron al principio de año, que erais un equipo complicado y que podría ser complicado, pero me habéis dejado claro que no. Habéis sido un equipazo, entendiendo que todas unidas hacen más que cada una por su cuenta. Que de los momentos más complicados se sale y que de los momentos buenos se disfrutan con humildad. Gracias a todas,a Marta López por su arte en todo momento; a Resi por demostrarme que un banquillo callado no sirve para nada; a Carmen por cada gota gastado en el campo y luchar hasta el final; a Marta Martín por aprovechar toda oportunidad que se le daba; a Natalia por todos esos momentos antes de entrenar tirando 200 tiros a una pierna de triple y meterla en el último partido y en un momento importantísimo; a Ale por levantarme en cada uno de tus tiros como si los hiciera yo y demostrarme que con alegría se juega mucho mejor a esto; a Nuria por sacar conversación en cualquier momento y hacer un gran torneo; a Vito por demostrarme que eso de que no tiene sangre es una gran mentira; a Paulilla por cada aro pasado que ha hecho que disfrutase como un niño; a Celia por cada pique que hemos tenido; a Rocio por cada momento de risa que me ha dado; a Lucia por su humildad y sus ganas de aprender; a Rosa por cada linea de pase robada; a Sole y Mercedes por cada canasta que conseguían alegrarme; a Marta Poyatos por su dedicación y a Sofía por cada canastita metida a tabla. Y para terminar, a ti Coach, por enseñarme a llevar un grupo, por tus oportunidades y confianzas depositadas en mi y que cada entrenamiento fuese como una final, dándolo todo siempre por animar a las niñas. Os lo merecéis.
Bueno yo solo quería dar las gracias tantoa a Alvaro como a Javi como a mis compañeras de equipo ya no solo por la cosa tan grande que hemos conseguido durante un solo año si no por devolverme la ilusión y las ganas del baloncesto y, no lo digo por decir lo digo de verdad porque lo siento. También quería decir que ha sido y va a ser un año inolvidable y que estoy súper orgullosa de pertenecer a esta gran familia porque para mi es no que sois. Por ultimo decir que aunque no haya escrito mucho lo importante ya lo tenemos todos en nuestros recuerdos y sera una cosa imposible de borrar. POR TODO ESO Y MUCHP MAS MIL GRACIAS!!!!
Que bonita palabra: gracias. Gracias por emocionarme leyendo esta crónica y comentarios. Buen día y buen verano, familia
Bueno me gustaria dar mi opinión sobre esta perfecta temporada. No se muy bien como pero creo que dando las gracias por estos meses que me habéis hecho disfrutar del baloncesto y que sea feliz con el, que cuando llegue del colegio cansada vaya a entrenar con energía,feliz e ilusionada con lo que hago. Gracias porque simplemente habéis hecho que sea feliz, que cuando llegase a los entrenamientos mis problemas exteriores se olvidasen, gracias por hacer de mi una persona más fuerte y luchadora, gracias por enseñarme a luchar por lo que quiero con constancia y paciencia, gracias por haber hecho que sea como soy que me muestre como verdaderamente soy y muestre como me siento, gracias también porque con este deporte he aprendido tanto aspectos personales como aspectos relacionados con este deporte. Muchos opinan que es un simple deporte en que corres tiras a una canasta y ala ahi se queds, yo me incluyo porque yo antes pensaba eso pero en esta temporada he aprendido que estaba equivocada, que es mas que eso.Y todo esto se lo agradezco a mi equipo pero principalmente a Alvaro y Javi, que todo esto lo hemos conseguido gracias a ellos y a la forma de llevar el equipo. Gracias a Alvaro por nunca darse vencido y por cada una de sus charlas motivadoras porque gracias a esas estamos aquí, porque gracias a esas charlas ha conseguido que nos unamos mas y formemos la familia que somos , yo creo que la frase que nos define es la unión hace la fuerza, pero esta unión ha sido gracias a vosotros. Habéis demostrado lo grandísimos entrenadores que sois pero no sólo eso, sino las grandisimas personas que sois. Alvaro gracias por los entrenamientos con música, por los miles de detalles que has tenido de crónicas, fotos etc.. Gracias por el vídeo de nuestra familia antes de jugar contra el cadete A.. También te quería dar las Gracias por lo bien que me has tratado esta temporada que ha sido de 10, por lo comprensible que has sido conmigo y la paciencia que has tenido, por haber confiado en mi y por haberme apoyado y ayudado, al igual Javi te digo lo mismo.
Y también me queda por último pedir perdón a todo el equipo incluyendo entrenadores por si alguna vez he sido injusta, os he decepcionado o si habéis tenido alguna vez alguna reacción o actitud negativa o mala de mi. Y por último dar las Gracias a Jorge Rossel porque gracias a el también estamos aquí y gracias a todos que nos han animado y apoyado siempre y han hecho que estemos aquí. Sólo espero que el año que viene sea una temporada igual o mejor con los mismos entradores y el mismo equipo y que la ilusión no se pierda. Muchísimas gracias de corazón por esta temporada. Grandisima temporada en la he derrochado tanto lágrimas de felicidad como de tristeza. En la que he aprendido que si se quiere se puede,nada es imposible. Mi unico miedo del campeonato era quedarnos en cuarto como en otras ocasiones.Mi unica preocupacion del campeonato era ganar por agradecimiento al equipo y a Alvaro y Javi y por coraje de haber siempre quedado en las puertas de las otras ligas y por sentir que de verdad nos lo merecemos por lo que hemos luchado y peleado. Me quedo con esta temporada entera, mi equipo y con mis nuevos entrenadores, que para mi ya son algo muy importante. Muchas gracias de verdad por todo. Feliz verano!!! Nos vemos en unos meses.
Muchas gracias a vosotros que habéis hecho que esta temporada sea inolvidable. Nos habéis enseñado de todo: jugar al baloncesto, jugar en equipo, que individualmente somos buenas pero juntas imparables, confiar en nosotras mismas, respetar al rival ante todo y así podría tirarme mucho mas tiempo.
Ojalá que el año que viene tanto javi como tú sigáis siendo nuestros entrenadores porque habéis hecho que disfrutemos del baloncesto.
Mil gracias por esta temporada.
Gracias a ti y a javi por hacer de este campeonato el mejor de mi vida, gracias por tantos momentos como el de hasta luego lucky, esos momentos de risa-llanto en el barecito de la primera panta, esos momentos de sorpresa al vernos con la cara pintada, cuando se nos olvidaron los balones (esto nos pasa solo a nosotras), tantas risas, tantas noches en vela hasta las tres de la mañana sin parar de reir, esos momentos en los que sole gritaba ¡hurraca! y todas corríamos para acostarnos y apagar la luz lo más rápido posible,esa noche inolvidable en la que se vio lo que nos queríamos y lo que nos importábamos entre nosotras, tantas gotas de sudor de todas y cada una de nosotras luchando por conseguir la meta a la que queríamos llegar y aunque no ha sido fácil, lo hemos conseguido. Simplemente gracias… no hay otra palabra mejor para describir todo esto. Este campeonato me ha enseñado que si persigues un sueño con dedicación y esfuerzo todo se consigue y más con esta familia a la que todos llamamos equipo. Que sepáis que siempre llevaré todo esto en mi corazón y estoy segura que lo repetiría 1000 veces más si hace falta.GRACIASSS
Alvaro!!! Sin comentarios, que bonito que ha sido pasar esta temporada de la mano de Javi y de la tuya. Esto se queda grabado, tan grabado como el tatuaje simbolico que algunas jugadoras nos hicimos anoche. Ha sido una temporada completita, llena de todo tipo de momentos, cada cual mas inolvidable que el otro. Alvaro, simplemente gracias a ti tambien, eres un grande y un crack!! Pasad un buen verano y nos vemos a la vuelta, con muchas mas ganas que este año. Besos!!!!